Asociadas Amatista en la

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viernes, 7 de mayo de 2010

La primera pregonera de la Feria de Mayo de Coín


María Enríquez Carabantes, a sus 77 años es la primera mujer que hace lectura del pregón de la Feria de Mayo en Coín. El pregón escrito conjuntamente con Sebastián Gámez Santos, conocido en Coín como poeta y con el que lleva casado desde 1954. Sebastián y María llevan juntos desde entonces y desde su adolescencia en 1947 cuando se conocieron e hicieron novios.
María es socia fundadora de Amatista en 1990

PREGÓN DE LA FERIA DE MAYO. Coín, 2010

María Enríquez Carabantes primera mujer pregonera de Coín. Hizo la lectura del pregón desde el balcón de las dependencias municipales de la plaza de la Villa.El Alcalde de Coín, Gabriel Clavijo inauguró la tradicional Feria de Mayo de la localidad y en el mismo acto concedieron la corona de las reinas infantiles y juveniles. Sebastián Gámez Santos, coautor del pregón pudo estar presente en ese momento tan especial y emotivo. Desde el balcón se dirigió con loas y vitores que fueron coreados por la multitud que desde la plaza disfrutaba del acto.



PREGÓN DE LA FERIA DE MAYO
COIN 2010

Estimadas autoridades, señor Alcalde, muchas gracias por haber pensado en nosotros para el pregón de esta feria. Consideramos un gran honor esta loa a Coín. La aceptamos de buen grado y esperamos estar a la altura. Se preguntarán ustedes, por qué nos han solicitado hacer el pregón, ya que nos somos ni eruditos ni famosos, y apenas pudimos ir a la escuela unos años, nuestra sabiduría viene de la escuela de la vida, la hemos adquirido con la experiencia de los muchos años que tenemos, toda una vida jalonada de momentos felices, pero otros a veces duros, como la que le tocó vivir a muchas familias de nuestra generación. Quizás han pensado en nosotros porque representamos a la gente sencilla de nuestro pueblo, gente de campo, que tuvo que emigrar lejos, allá a Cataluña que nos acogió y nos dio la oportunidad de prosperar y años más tarde volver, para ver con gran satisfacción el progreso de Coín y que ahora ¡quién lo diría! somos tierra de acogida también para otros pueblos.
Coín, el hermoso pueblo que nos vio nacer y que acoge a todo el mundo que viene por su trabajo, acoge a quiénes se enamoraron aquí y formaron familia, cuidan sus huertas, cultivan sus campos, recogen sus frutos y valoran la sencillez de nuestra gente. El buen trato y simpatía es la mejor de las riquezas que podemos ofrecer y lo más bello. Son Coineños y coineñas quienes viven y trabajan en nuestro pueblo, quienes emigraron y regresan cada año y después vuelven al jubilarse. También hoy queremos recordar a aquellos que por otras circunstancias están lejos o no pueden venir a disfrutar de nuestras fiestas, porque estamos seguros de que nos tienen en la memoria al igual que nosotros a ellos.
Estamos de enhorabuena este año que ha llovido lo suficiente para hacer renacer al Río Nacimiento, río que sólo los más mayores habíamos visto brotar de entre las piedras con gran fuerza. ¡que alegría da verlo!
Cuanto nos enorgullece el gran número de artistas que tenemos, las asociaciones que participan en la Cultura, la labor social y el Deporte, La conciencia mayoritaria a favor de la igualdad y contra la violencia hacia las Mujeres, la solidaridad con las personas que sufren.
Además, Coín tiene dos grandes ferias, la de Mayo que celebramos ahora y la de Agosto ambas a cual más populares. La feria de mayo, en plena primavera, cuando nuestra Patrona, la Virgen de la Fuensanta, se traslada a la ermita. El día de las cruces, el 3 de mayo, El Cristo del Perdón, sin trono, visita a las cruces y a los enfermos que no pueden salir de sus casas, y después sale en procesión esta imagen tan querida en Coín desde antaño ¡Que bonitas están las calles con su cruz adornada de flores y los objetos decorativos! Los peroles de cobre, usados para cocinar la carne membrillo, las escenas antiguas que preparan las vecinas, estampas costumbristas como un panadero sacando pan del horno, un pozo con la carrucha y la cubeta, mujeres y hombres vestidos con trajes típicos haciendo labores, los balcones adornados con mantones de manila, las mejores colchas bordadas y las ventanas llenas de flores. Los rincones donde está la cruz, disponen de una mesa para ofrecer entremeses típicos como altramuces, aceitunas aliñadas, una botella de vino, chacinas típicas y algunas cosillas más. El jurado de este concurso de cruces tiene un difícil papel, aunque ganan sólo tres cruces, todas merecen premios por el cariño y el esfuerzo que hacen los vecinos en montarlas y decorarlas.

El vecindario sirve tapas variadas a las gentes que se reúnen. Al mismo tiempo se ofrece a los visitantes productos típicos de Coín como la sopa hervida, zumo de naranja, vino fino.
Los caballos se pasean por las calles del pueblo del parque a la Alameda. La música suena en las Casetas, en la feria de día, de noche, el tiovivo y la noria hace las delicias de los menores, jóvenes y mayores, la tómbola, los turrones y al amanecer churros con chocolate.
Disfrutad de estos días, sed optimistas, pensad en un futuro próspero, divertido y con salud. Las crisis otras veces han existido y la hemos superado con creces.
¡Viva la Virgen de la Fuensanta! ¡Viva Coín! y ¡Viva la feria de Mayo!
Abrazos para todos y todas.


Sebastián Gámez y María Enríquez
Coín, 2010